En medio de un día semi caluroso quiero compartir mis primeras palabras para inugurar este blog. Aunque aún no estoy muy familiarizada con este medio, me parece una buena herramienta de comunicación. Igual me declaro una nostálgica empedernida... antes extrañaba las cartas que se tardaman semanas en llegar a destino... incluso ahora extraño los eternos e-mails de mis amigos... ni siquiera han escrito comentarios en mi Fotolog... demasiada modernidad para mí. Por lo menos aquí me puedo expresar yo, sin esperar que los demás lo hagan... libremente, sin verguenzas ni censuras... sin miedos, sin límites... y eso me parece buenísimo.
Ojalá hubiera existido esto cuando tenía doce años... así habría evitado que el profesor de ciencias naturales me quitara, en plena clase, mi diario de vida y lo confiscara por semanas... para luego chantajearme con chocolates a cambio de mi preciado cuaderno lleno de secretos... Aunque, claro, está... esto finalmente tendrá muy poco de secreto... pero por lo menos, no tendré que verle la cara a nadie. Eso es un alivio. Y yo me que quedo tranquila con mis descargos.
La mejor terapia. No?
